Solera Flamenca presenta Cuerdas ALMA por Vicente Amigo
Estas cuerdas no son un simple producto comercial al que se le ha puesto la imagen de un artista previo acuerdo comercial y se ha lanzado al mercado confiando en que la imagen hará el trabajo y en el que además, ni siquiera el propio artista que aparece en producto haya tenido (ni tenga) la intención de utilizar en su vida. Nosotros no creemos en este tipo de productos ni de negocio. Sin lugar a dudas, el principal factor que determinará el éxito o fracaso a la hora de crear un producto es CREER EN ÉL.
Como ya sabéis, a finales de 2020 sacamos al mercado nuestra propia marca de cuerdas para guitarra: Solera Flamenca STRINGS, un producto creado con la intención de cambiar para siempre el concepto de cuerdas para guitarra flamenca alejándonos de la tendencia del mercado actual de crear cuerdas con una tensión cada vez mayor, que terminan por destruir la propia guitarra así como la salud del guitarrista.
El resultado fue todo un éxito en el sector, con cientos de valoraciones positivas por parte de guitarristas, profesionales y aficionados, de todo el mundo.
Pero queríamos ir más allá, nuestra confianza en el producto que habíamos creado era tal que necesitábamos tener la opinión sincera del más grande, del maestro, de Vicente Amigo, para confirmar que estábamos en el camino correcto.
Aquí es donde comienza esta maravillosa historia y… es que: “Para conocer la esencia de las cosas es necesario conocer su historia”
Sí, enviamos nuestras cuerdas a Vicente Amigo y accedió a probarlas.
Tras unos días de prueba nos transmitió su opinión: “son unas cuerdas increíbles pero… si tuviesen aún menos tensión serian perfectas”. Sin pensarlo dos veces nos pusimos a introducir cambios en nuestra cuerda para conseguir una pulsación todavía más suave y confortable que fuese capaz de satisfacer las necesidades de este genio guitarrista. El resultado no se hizo esperar y tras pruebas de ensayo y error conseguimos lo que buscábamos. Una cuerda con las mismas prestaciones de calidad y sonido que ya teníamos pero con una pulsación aun más suave.
El veredicto del maestro tras probarlas fue claro: “Esto es lo que yo buscaba”.